jueves

Que vengan los bomberos...

Esta mañana, en el rush matutino, rumbo a la oficina –tarde, por cierto- iba escuchando una estación de radio, porque se me olvidó mi “aipo” y pus no me quedó más remedio que sintonizar algo. Escuchaba un reportaje acerca del Síndrome del “Burnout” que me impactó muchísimo…

Decían que éste síndrome está directamente relacionado con el estrés laboral que vivimos a diario, o mejor dicho las dosis altas de estrés. Las consecuencias pueden ser devastadoras tanto para el empleador como para el empleado, es decir; no hay productividad. El trabajador entra como en etapa de desgano, apatía, flojera, pereza, indiferencia, desidia, abandono, dejadez. Esto es en la parte emocional, pero también se traduce a padecer cambios físicos típicos del estrés: levantarse de la cama ya cansado, dolores musculares, dolores lumbares y de cabeza, problemas digestivos, tos crónica, etc.

Puede dentar también en los estados de ánimo y llevarte a depresiones, sensibilidad y hasta insatisfacción.

Es como un vacío interior, sentirse mediocre, que no tiene nada que ver con las capacidades ni con las aptitudes del individuo. La mayoría de las veces se trata de personas altamente inteligentes y productivas. A mi manera de ver, el nombre de este padecimiento lo dice todo: puesto que literalmente te quemas en el trabajo, estás “desvielado”… en punto muerto.

apatía, desgano+depresiones+malestares físicos= ausentismo, poco/nulo interés en la chamba= inproductivo= ADIOS, NO SIRVES, GRACIAS, MÁS SUERTE LA PRÓXIMA, GUARDA TUS COSITAS EN CAJA DE CARTÓN...

¿Las causas? Pus, son variadas… pero desgraciadamente es la mala paga y las largas jornadas laborales las que te llevan a desarrollar el síndrome. Porque pus no es lo mismo llevarte una mega chinga bien pagada, a lo común: una mega chinga muy mal pagada. Otra causa importante puede ser el escaso o nulo desarrollo y/o reconocimiento laboral. Las personas que son eventualmente elogiadas por su trabajo, presentan en menor escala el “burnout”. ¿Y que hay con el desarrollo intelectual? Quienes gozan de tener crecimiento mental y están constantemente creando, también tienen menos posibilidades de desarrollar este Síndrome.

Ojo, no es exclusivo de empleados de “cuello blanco”. Nos puede atacar a cualquiera y se presenta como cansancio y fatiga crónica. Estas personas siempre están bajo la presión de tener “muchas cosas” que hacer y nunca las terminan.

No sé realmente si existe un tratamiento para combatirlo, pero sin duda creo que la actitud con la que enfrentamos las cosas que están delante nuestro pueden ayudar bastante. Crear un ambiente laboral amable es esencial. Quizá sea una responsabilidad compartida osea paciente / médico. Dormir bien. Comer bien. Hacer un poco de ejercicio, físico y mental; el desconectarte por lo menos una hora de tu chamba leyendo o haciendo algo de tu agrado puede ser reestructurador. Y pus todas esas recomendaciones que ya sabemos…

La pregunta que yo lanzo es : ¿Qué tanto se está quemado o se padece el síndrome? Y ¿Qué tanto se sufre el desgaste mismo de la profesión que se desarrolla? …Lo que es un hecho es que ésta es otra de “esas” enfermedades silenciosas terriblemete voraces y destructivas propias del mundo en el que vivimos...

aburrrr