sábado

Hoy

Tus ojos traspasaron los míos de manera distinta,

nos regalamos hermosas miradas largas.

Dejamos el pasado a un lado,
para abrirle una puerta al futuro
que quizá aún incierto es,

pero tapizado de aires nuevos,

envuelto en sensaciones desconocidas.

Hoy tengo ganas de que te aferres a mi cintura
con la fe de no soltarte jamás…

Quiero que seas tú el que me entienda,
el que me quite este traje gris
y me acompañe a soñar despierta.

Hoy, quiero regalarte mis labios,
que los beses hasta deshidratarlos, evaporarlos
y hacerlos comulgar con los tuyos
a manera de experiencia religiosa.

Hoy quiero que escojas ese rincón secreto
para besarlos de nuevo…

una y otra, y otra vez...

¿Hay algo malo en ello?

Hoy, nos dimos caricias etéreas, sutiles
apenas nos rozamos...,
sin embargo escuché un suspiro contenido;
nuestros alientos entrecortados
para mirarnos de nuevo
y descubrir que solos no estamos.

Tragamos saliva y tratamos de reprimir
la sinuosa respuesta de nuestros cuerpos;

el sensual olor del nerviosismo,

el silencio de las palabras,

traduciendo el lenguaje en miradas,

y a ratos hablar para asegurar con voz
lo que para entonces…,

Ya era evidente…

Confirmarnos que...¿?

5 comentarios:

Hernández dijo...

Hola, María.
Me gustó mucho tu poema en prosa –o tu prosa poemada–. No sé por qué, pero me recordó un poema de Cortázar que viene en Rayuela: "Toco tu boca..."
¿Lo recuerdas?

María dijo...

José, Hola.

Qué honor que este conjunto de letras te hayan evocado a un grande como lo es Cortázar.

"Toco tu boca"; no lo recordaba sino hasta hoy y curiosamente fuiste tú quien me lo hizo recordar... me has arrancado un lindo suspiro.

Un beso

"Toco tu boca, con un dedo todo el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano en tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.
Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más cerca y los ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos, donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua."

Julio Cortázar

Pau Llanes dijo...

Extrama sensualidad... a veces a uno le gustaría escribir (leer) un poema todo entero de SSS que se leyara como un suspiro, como un siseo, como un gemido entrecortado de eses mudas, líquidas, bilabiales, oclusivas o abiertas, pero esessss... por favor, todo esesss enroscadas a las t, a la l, a las i chiquitas y a las j más poderosas... Lo lograste, a pesar de las otras letras... kissess... Mar-ía... Pau

Anónimo dijo...

Hola
Debe ser una experiencia muy hermosa que una mujer como tú le escriba a su amado tantas cosas. Si él existe y las lee debe sentirse muy afortunado.
Yo, es la primera vez que comento, más no las veces que te leo. Bien.

Saludos

aus dijo...

wow, cómo olvidar a quién nos hace sentir así con sólo rozarnos...