Cuandolascosasnovanacompañadasdeldetalle
massencillooelmasespecificonoscuestatrabajo
entenderlascosasdentrodeunaconvivencia
llevadosporlacotidianidadperdemoselcuidado
ynosdejamosllevarporlosgrandesgestos.
Así como en este texto, en el cual las palabras, por sencillas que estas sean, no van acompañadas de su acento, de su tan celoso E S P A C I O , de su punto y aparte (o seguido); no están sentadas junto a su coma; se hacen bolas las altas con las bajas; obviamente nos da pereza seguir leyendo, y las letras (por mágicas que sean), se convierten en sólo eso: caracteres unidos sin sentido, sin la fuerza necesaria para darle ese chasquido que suene en tu cabeza y te haga despertar del letargo y seguir con la lectura.
Y es que, son los detalles el combustible para convivir con otros. La mayoría de las veces no nos detenemos a observar, no les permitimos que nos cambien, que nos enseñen; simplemente los ignoramos por falta de tiempo, de interés, de paciencia, por escasez de fe.
A final de cuentas, si en un texto cuidar el detalle de una coma, un punto, un E S P A C I O es importante, en el día a día son esos pequeños /grandes detalles los que le arrancan una sonrisa a alguien y…
¿A quién no le gusta hacer sonreír a las personas que quiere?